
Me estaba acordando de
Hungria,de lo bueno que estaba el
goulash,del sabor que tenia el salami
Pick,del mercado de Budapest,de los baños Szechenyi,tan calentitos ellos,de la quietud del Danubio,de las vistas desde la
Ciudadela,del
hotel Charles en Hegyalja út 23,del estrambótico idioma imposible de relacionar con nada conocido,del caracter reservado de la gente,de las señales dejadas por los disparos de bala en el edificio del antiguo ministerio del interior,de los tranvias amarillos,del mercadillo de ropa de segunda mano,de la rasca que hacía en todo momento,de lo guapa que estaba Eva,de la abuela a la que le compramos flores,de los spaghetti en la cocina del apartamento,de lo bonitos que son los edificios y lo hechos polvo que están la mayoría....Muchas cosas.
Si podeis,visitad Budapest.
Os gustará.
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